La entrada en escena de la pequeña Kawasaki Versys 650, en 2008, representó una inyección de aire fresco en el panorama de las trail de cilindrada media. En un viaje inolvidable a Grecia descubrimos la primera Versys de la historia.
ÁLEX MEDINA
En Halkida hay un puente que comunica con la isla de Eubea. Muy cerca de Atenas, mucha gente acude a esta zona en cuyo interior salpicado de viñedos y granjas se respira paz y tranquilidad. En este escenario descubrí la primera “VERsatile SYStem” Versys 650 en el 2008. Y recuerdo como a los probadores que viajamos hasta Halkida, nos llamó la atención la buena protección de su carenado y una posición de conducción marcada por el asiento muy bajito que contrastaba con los brazos en alto.

Nuestro viaje continuó bordeando el Golfo de Eueba, pasamos por Limmi con sus casas encaladas y tabernas. Embarcamos en Edipsos para volver al continente desembarcando en Arkitsa para ir a Konstantinos. Pasamos por un montón de carreteras muy resbaladizas un grupo de 14 motos en manos de periodistas de diferentes países y la pequeña Versys demostró buenas maneras.

Siendo una moto de estética trail lo cierto es que sus reacciones eran las de una moto de carretera al cien por cien, con un chasis más rígido que el de las trail de media cilindrada. Se basaba en la ER-6 (naked) de la que tomó su chasis y propulsor. Su punto fuerte fue, desde mi punto de vista, un motor con carácter y un punto excitante. Rendía 64 cv de potencia para 185 kg. de peso; alcanzamos con ella los 197 km/hora y en España se comenzó a comercializar por 6.749 €. Esta primera versión nació ajustándose a las necesidades del mercado de entonces: una moto sencilla, económica y capaz de ayudarnos en el día a día por ciudad o desplazamientos interurbanos y también para hacer turismo.
En 2010 tuvo algunos retoques a nivel de estética, como la incorporación de un faro trasero tipo lead de inspiración Z1000, además del ABS como opción.Su renovación más profunda llegó en el 2015 y modificó su estética inspirándose en la versión de 1000 cc, además de incorporar la pantalla regulable. También se modificó el depósito de combustible para poder llegar hasta los 21 litros de capacidad. Otros detalles de esta evolución afectaron a las pinzas de freno y suspensiones. La horquilla delantera (regulable) aumentó su recorrido en 25 mm, y detrás se montó un pomo para regular la precarga de muelle. También mejoró a nivel de vibraciones con el montaje de gomas en los anclajes de manillar y estriberas. Para ganar en capacidad de carga y hacerla más viajera, en la versión Tourer se incorporaron nuevos accesorios, como maletas con 28 litros de capacidad, baúl trasero o puños calefactables. La pequeña Versys 650 sigue actualmente en la gama de Kawasaki y también se fabrica una versión de Versys 300.
La llegada de la Versys 1000
Podemos decir que la pequeña Versys fue una buena escuela para Kawasaki, puesto que le permitió entrar de lleno en el mundo de las trail asfálticas. Y su apuesta, con el tiempo, ha demostrado ser acertada; en este momento, con una supercompetitiva Versys 1000 SE en el mercado, las trail asfálticas son verdaderas protagonistas en las listas de ventas. Así que, aprovechando el tirón de la pequeña Versys, por fin en 2012 llegó la impresionante Versys 1000.

Aquella primera versión de la Versys 1000 conservaba la estética un tanto particular de la 650, pero equipaba un propulsor de 116 cv con dos modos de potencia, control de tracción KTRC y un buen nivel de equipamiento. La verdad es que resultó ser una moto sorprendente, puesto que equipaba un chasis de doble viga y un motor muy excitante derivado de la Z1000X. Es decir, que Kawasaki interpretó su concepto de trail asfáltica, con una base prácticamente de Superbike, manillar alto y una buena protección aerodinámica. ¡Bien!

Al año siguiente se comercializó una versión denominada Gran Tourer, que equipaba maletas, baúl y un protector para el depósito de combustible con 21 litros de capacidad. En 2015 la Versys 1000 dio un gran paso adelante. Su cambio más evidente fue una nueva carrocería más envolvente, con una mejor protección aerodinámica gracias a una cúpula más alta y regulable que supuso una gran mejoría a nivel de confort. También el asiento se modificó en busca de aún más comodidad en las largas distancias. Además, su doble faro se desmarcó de su estética anterior y se puso en línea con la competencia. A nivel de propulsor también se renovó considerablemente con nuevos inyectores, bobinas o catalizadores. Aprovechando el diseño de la nueva carrocería, se modificó la caja de filtro, entre otros componentes. Las suspensiones se mejoraron, incorporando una horquilla invertida que ganó 20 mm de recorrido.
Revolución
La auténtica revolución de la familia Versys ha llegado este año. Las versiones base y muy especialmente la SE, suponen un antes y un después con tres niveles de equipamiento denominados Tourer, Tourer Plus y Grand Tourer. La versión SE es todo un alarde a nivel de tecnología del que ya os hemos hablado en otras ocasiones, pero que conviene recordar que gracias al nuevo acelerador electrónico con cuerpos de mariposa dobles en cada uno de los cilindros, IMU de seis ejes, un sistema Cornering ABS muy avanzado, modos de conducción y control de tracción entre otras historias, la sitúan como una de las mejores y más originales grandes trail asfálticas del momento. Sin perder su esencia, pues es de las pocas motos de este estilo con un tetracilíndrico en línea, la Versys se ha puesto al día para adelantarse a su tiempo y de nuevo marcar tendencia. Una moto que en esta versión con 120 cv de potencia combina con maestría las sensaciones deportivas marcas de la casa, con un plus en cuanto tecnología, confort y seguridad.
