¡Ninja power!
La Ninja sigue evolucionando para seguir dominando en el mundial de Superbike y ofrecer al mercado una de las mejores Superbike de la historia. La probamos en Japón.
El mundial de Superbike sigue siendo siendo una prioridad en la estrategia de Kawasaki. Su éxito en la pista, donde recordemos que con Rea ha ganado las últimas tres ediciones del WSBK, queda reflejado en sus motos de producción y de esta forma la familia Ninja evoluciona al ritmo que marca la competición entre las motos derivadas de serie del más alto nivel. Una evolución que no se detiene.
Hace dos años se puso a la venta una exclusiva versión de su ZX-10 RR y ahora llega una nueva versión de la que solo se fabricarán 500 unidades, con la que tuvimos la oportunidad de rodar en el circuito de Autopolis, en Kumamoto (Japón), propiedad de Kawasaki.
Una pista realmente complicada con muchos desniveles, curvas sin visibilidad, zonas rápidas, otras más lentas y un asfalto con muy buen grip incluso en mojado.
Kawasaki presenta tres versiones de su nueva Ninja y por el momento solo pudimos probar la versión ZX-10 RR. Es decir la que se diferencia de la versión base por montar un asiento individual, llantas de Marchesini y bielas de titanio, una de las novedades más destacadas de la nueva familia Ninja. Una tercera versión (ZX-10R SE) con suspensiones electrónicas, completarán la nueva y competitiva serie 2019.
La caja roja
A simple vista su estética nos resulta familiar pero si observamos con detalle cualquiera de las tres versiones, observaremos que las culatas son ahora de color rojo. En el interior de las nuevas culatas que son parte importante de unas prestaciones superiores (203 cv la versión base y 204 cv la RR),
se ha desarrollado un novedoso sistema de actuación de actuación de las válvulas por balancín por el que se reduce la masa en un 20%. Este sistema facilita el poder montar las levas con un perfil más agresivo. Los balancines, que sustituyen a los más clásicos empujadores, incorporan un recubrimiento DLC que augura un menor desgaste. La culata de las tres versiones esta ahora preparada para poder montar el árbol de levas heredado directamente de la experiencia de Kawasaki en competición.
Pero más allá de la nueva “caja roja” en la versión RR se montan unas bielas de titanio que son más ligeras. Más cosas. El cambio semi automático se incorpora ahora en las tres versiones. Un cambio tipo quick shifter que vimos en la versión RR del 2017 pero no en la versión base y que sin duda alguno tiene mejor tacto y precisión.
Consecuencias
Las mejoras en el nuevo propulsor suponen un importante cambio a todos los niveles, especialmente en la versión RR puesto que ahora sube 600 rpm más que la versión anterior. Y desde nuestro punto de vista, esas mejoras quedan materializadas el comportamiento de la nueva Ninja a nivel de parte ciclo puesto que se ha tenido que adaptar a las nuevas necesidades en las que entre otras cosas, además de las prestaciones, se trabaja con menos inercias.
Así que con buen criterio se ha modificado la electrónica y también la puesta a punto a nivel de parte ciclo y la ECU trabaja directamente sobre la Unidad de Medida Inercial (IMU) para analizar cientos de parámetros. No faltan el Launch control, control de tracción con cinco niveles de actuación (regulable), tres modos de potencia, ABS y un sistema de ayuda en curva denominado KCMF.
Las suspensiones de Showa se conservan con una la horquilla delantera con cámara de compresión presurizada y detrás vemos el mismo mono amortiguador regulable. En ambos casos un nuevo “setting” optimizan las prestaciones de la nueva Ninja.
En pista
Poder probar una moto como en este caso la nueva Ninja en el circuito donde se ha desarrollado, es todo un privilegio. Nos fuimos hasta Japón donde de nuevo, más de diez años después, me encontré con un circuito que parece una montaña rusa. Unicamente Portimao en Portugal, tiene tantos y tan pronunciados desniveles. No falta una zona muy revirada con una fortísima pendiente, en la que se van empalmando curvas a derecha e izquierda.
La climatología estuvo algo caprichosa pero pudimos rodar con la nueva Ninja en condiciones de seco y también con la pista húmeda y neumáticos de agua.
La verdad es que la posición de conducción me resultó familiar. Es una moto muy compacta en la que si mides 1’79 puedes tener la sensación de que es un poco pequeña. No me hicieron falta completar muchas vueltas para darme cuenta de que la Ninja ha mejorado especialmente a medio régimen y se supera en lo que se refiere a la precisión con que se puede controlar el par con el puño de gas.
Tiene un carácter amable a bajo/medio régimen y una zona alta agresiva y contundente. Desde mi punto de vista el encanto y lo mejor de la nueva Ninja es la combinación entre la elasticidad y suavidad de su propulsor además de un punto excitante (!204 cv!), junto a una parte ciclo que se ha sabido adaptar de forma armoniosa a las necesidades y carácter de un propulsor extraordinario. Un motor que a partir de las 7.500 rpm es un misil.
Otro aspecto a destacar es que el tacto del cambio semi automático es ahora más agradable y preciso en cualquier régimen que el que recuerdo de la versión RR de hace dos años.
Con la pista húmeda y neumáticos de agua también me sentí cómodo a pesar de que la pista tenia tramos húmedos y otros prácticamente secos y la dificultad que supone adaptarse a estas situaciones. Montamos neumáticos de agua. En la puesta a punto conserve el ABS y subí el nivel de actuación del control de tracción (4 sobre 5). La entrega de potencia y carácter del propulsor de la nueva Ninja y el buen feeling de los neumáticos de agua especialmente en la última parte de prueba cuando empezó a llover con más intensidad, me pusieron las cosas más fáciles a pesar de cierta sensación de flotabilidad del tren delantero acelerando en una larga recta de bajada, después de la curva de derechas final de recta de este circuito en medio de ninguna parte…
La nueva Ninja es una moto más completa, más potente y a su vez más fácil de conducir. Al modificar la distribución y ganar 600 rpm (versión RR), trabaja de forma más desahogada a medio régimen y gana “punch” en la zona alta.
En definitiva Kawasaki sigue evolucionando su Ninja para seguir reinando y conservar la más efectiva Superbike del momento.
Álex Medina